lunes, 21 de diciembre de 2009

Un poema con mi nombre



ANA Y LA LLUVIA


Ana pierde el rumbo en las ventanas,
dando tumbos se hace un hueco
por entre el gris de la ciudad,
y no se da cuenta que los gatos lloran
cuando vuelve a casa sola,
cuando duerme en soledad,
quiero creer que eres fuerte,
que tus ojos aún miran de frente
y tus abrazos son verdad…

Qué puedes hacer,
ten cuidado,que ha llovido
y el suelo está mojado,
y se resbalan tus ojos,
tus manos,la vida y los sueños…

Y las palomas te alborotan el pelo,
qué puedes hacer con tanto dolor…
Ana (las calles se arrodillan cuando pasas),
y se marchita la parada del autobús
que no cogiste ayer,
y no sé qué hacer, o bajarte el cielo,
o cogerte el mundo o traerte un caramelo,
o inventarme las palabras
que nunca podré escribir,
que no valen nada si estas de perfil,
si no estás aquí…

Si no estás aquí, sucederá tal vez
que no habrá nadie
y que no queden rincones para mí…
Si no estás aquí, sucederá al revés,
que entonces tus minutos
sean segundos para mí,
si no estás aquí…

Voy a descifrar cómo se desparrama el tiempo,
a intentar alisar los pliegues de tu cuerpo,
a desenredar los alambres,
a no protestar si tengo hambre,
a comprender que Ana y la lluvia
son complicadas para mí…
a ponerle FIN a este cortometraje,
a deshacer las maletas de este viaje
que empieza contigo y acaba sin ti.


Luis Ramiro

¿A quién no le gusta sentirse el/la protagonista de una canción o un poema?

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